PUBLICADO EL 20 AGOSTO, 2010 Ministro Cruz-Coke en cuenta pública: ‘La cultura es una herramienta de desarrollo social’

«No podemos continuar un camino sólido  hacia el desarrollo si no le concedemos a la cultura el valor y la estatura que merece. Tenemos que situar a la cultura en el centro del debate», señaló el Ministro al referirse al importante desafío que significa entender como sociedad la definición  que la palabra cultura debiera tener para todos los chilenos.


Esta mañana en el Teatro Diego Rivera de Puerto Montt y a seis meses en la dirección del Consejo de la Cultura, el Ministro de Cultura, Luciano Cruz-Coke, rindió frente a autoridades del mundo de la cultura su primera cuenta pública nacional. Antes de comenzar rindió un homenaje al audiovisualista Claudio Sapiain y al escultor y Premio Nacional de Arte Sergio Castillo, ambos artistas fallecidos durante el día de ayer.

En su discurso, el ministro invitó a los asistentes a darle a la cultura el espacio que se merece, a hacerse cargo de construir un ambicioso futuro donde esta sea verdaderamente condición esencial de desarrollo de nuestro país. «Tenemos que trabajar en anclar la cultura en todas las políticas de desarrollo, se refieran a la educación, medio ambiente o el turismo, y en sostener el desarrollo del sector cultural mediante industrias creativas», agregó. De esta forma la máxima autoridad en materia cultural, los invito a estimular la producción de conocimiento que garantice la protección de los derechos culturales, y que genere prosperidad económica y social.

La cuenta pública  comenzó con una evaluación de diferentes problemáticas que enfrenta actualmente el Consejo de la Cultura en la historia de su gestión: en primer orden el problema de la «centralización» y necesaria «descentralización» que el ministro insistió es tarea imprescindible dejar atrás en la actual administración». En torno a las fallas de la institucionalidad cultural existente (segregación y duplicidad), el Secretario de Estado señaló que es fundamental un diagnóstico con honestidad para dibujar el tránsito a la adultez. Recalcó problemas sobre la disgregación de recursos, duplicidades, metas sectoriales dispersas y traspaso de presupuesto sin control de resultados. Pese a que Cruz Coke recalcó el aporte de nombres como Claudio Di Girolamo, Manuel Antonio Garretón, Milan Ívelic, Agustín Squella y particularmente al ex ministro Luis Weinstein a la creación de este espacio institucional para la cultura, la compleja labor de instalar y posicionarla dentro de la complejidad del sistema público y reunir a un grupo humano en pos de un desafío país, agregó: «No nos conformado con los avances. Hemos dado los primeros pasos, estamos ante una institucionalidad carente y con falencias».

Otro de los puntos a evaluar durante esta mañana fue la grave falta de crecimiento del consumo cultural versus la inversión en los incentivos para los creadores en Chile.»Tenemos que reconocer que no hemos logrado posesionar el consumo cultural. Si Chile apuesta al desarrollo, la cultura debe estar en el centro del desarrollo de las oportunidades y debemos llegar con ella a los mas vulnerables».

También hubo tiempo para recordar la contingencia que generó el terremoto, y el evidente daño que subyace a esta tragedia y que amenaza en hacer desaparecer una manera de vivir, parte importante del patrimonio material e inmaterial del país. Para el final de esta primera etapa de su exposición el Ministro de Cultura dejó un espacio para el reconocimiento a los funcionarios del Consejo de la Cultura. Valoro su esfuerzo y los invito a trabajar unidos en que el desarrollo cultural conquiste un espacio protagonista en el crecimiento de  Chile.

LA CULTURA EN EL CENTRO DEL DEBATE

«No podemos continuar un camino sólido  hacia el desarrollo si no le concedemos a la cultura el valor y la estatura que merece. Tenemos que situar a la cultura en el centro del debate. ¿Qué rol le conferimos como sociedad?», se preguntó el Ministro al referirse al importante desafío que significa entender como sociedad la definición  que la palabra cultura debiera tener para todos los chilenos.

Lo anterior pasa por responder como sociedad si le conferimos el papel decorativo o le reconocemos el poder transformador profundo que muchos creemos  tiene en la calidad de vida de las personas», enfatizó haciendo un llamado a ponerla en el centro de la discusión, a considerarla como una verdadera herramienta de desarrollo social.

En cuanto a las prioridades y ejes de trabajo de la nueva administración, Cruz Coke dividió sus lineamientos en cinco ámbitos: Modernización Institucional, Fomento a las Audiencias, Industrias Creativas, Educación y Cultura  e Infraestructura y gestión.

Modernizar el Consejo de la Cultura

En el marco del Plan de Modernización del Estado que está impulsando el Gobierno del Presidente Piñera, Cruz-Coke anunció un plan de modernización  del Consejo de la Cultura. «Nos hemos propuesto ser capaces de desarrollar políticas culturales cuyos cumplimientos sean verificables en sus distintas etapas de avances, implementando sistemas de evaluación de los programas existentes y de los nuevos que deberemos impulsar, en conjunto con Mideplan. Generaremos indicadores cualitativos y cuantitativos para la correcta toma de decisiones del servicio», explicó. Esta meta incluye hacer más eficaz el servicio que el Consejo de la Cultura brinda a todos los ciudadanos, cuestión que significa hacer eficiente procesos como los Fondos Cultura, mejorar las condiciones internas en esta institución, hacer más rápida y eficaces las funciones que este servicio cumple y finalmente desarrollar una imagen potente de esta institución frente a la comunidad.

Audiencias

Cruz-Coke reveló que el Consejo se encuentra en plena fase de estudio de un programa de subsidio a la demanda cultural de grandes alcances y con especial foco de todos aquellos con menos posibilidades de acceso. «Esto puede significar una verdadera revolución democratizadora en la promoción de los derechos de las audiencias en cuanto a sus posibilidades de acceso y sus oportunidades de elección libre de aquellos bienes y servicios culturales de su preferencia, lo que a la vez estimulará a la oferta a ofrecer mayor cantidad y más atractivos servicios tendientes a la satisfacción de esta demanda», explicó.

El Ministro señaló lo grave que es que en Chile la cultura esté apartada a un lugar  en que  no participa del medio más masivo e importante como es  la TV. «Reclamamos nuestro derecho a participar de la discusión de la TV digital. Queremos voz y voto en la TV digital: este es un cambio de contenidos! no queremos estar fuera de este revolución. Debemos estar en el centro mismo de esta discusión», señaló.

Industrias Creativas

Tal como explicó las llamadas industrias creativas constituyen el núcleo estructural que permite la conversión de la creatividad en un producto y/o servicio, vía directa para traducir la cultura y la creatividad en impacto económico sobre un espacio determinado. «Si algo hemos aprendido es que dadas nuestras dimensiones debemos trabajar en red, debemos buscar integración. No podemos trabajar en el desarrollo de las industrias culturales aislados de otras instituciones, menos cuando hablamos de generar valor agregado a nuestro desarrollo como país. Potenciar nuestras riquezas, relacionar nuestra identidad y nuestra cultura, generando alianzas con el turismo, es mandatorio», agregó. Para esto en materia audiovisual Cruz-Coke hizo un llamado  a generar una cadena de intermediarios en el desarrollo de un producto cultural. «Le hemos conferido al responsabilidad de difusión a los artistas cuando esa no es su fuerte. Creo firmemente en los procesos en cadena y para eso son esenciales los expertos en gestión y difusión». La cultura debe ser una oportunidad de desarrollo: necesitamos proveer de condiciones equitativas y competitivas para que nuestros artistas puedan salir en busca de sus proyectos. Debemos trabajar en red», señaló.

Educación y Cultura

«Es un deber moral estar presentes desde la formación de nuestros ciudadanos», explicó el Ministro. Por eso, otro de los grandes líneas de trabajo de la actual administración es producir una articulación estratégica con el Ministerio de Educación en virtud de potenciar las capacidades de ambos para buscar un desarrollo integral de los ciudadanos del futuro.

El primero de estos panes es un plan coordinado de fomento a la lectura en todo el país, en todos los estratos socioeconómicos y en todas las edades, buscando desacralizar la lectura y convertirla en una herramienta de crecimiento cotidiano que se encuentre en bibliotecas pero también en los espacios ciudadanos. Próximamente, el Presidente anunciará la coordinación multisectorial de un plan de fomento a la lectura que llegará a todos los rincones del país y que irá acompañado con un plan de mejoramiento de las bibliotecas en su infraestructura y en su gestión. La implementación conjunta con Mineduc de este programa asoma como una de las principales tareas en materia de lectura, así como incidir positivamente en los bajos índices de lectura que ostenta el país.

Por otro lado, ya está en marcha un plan coordinado conjuntamente con la Fundación para la Superación de la Pobreza y Mideplan para restablecer los criterios de focalización y localización de programas de acceso cultural en barrios vulnerables. Este Servicio País Cultural comenzará el año 2011 y recogerá la experiencia aportada por el Programa Creando Chile en mi barrio que ya concluye.

Infraestructura y gestión

«El desarrollo cultural requiere necesariamente de un espacio para crecer explica el Ministro de Cultura. Sin embargo, la infraestructura no es un valor por sí solo si no es gestionado de manera que provea por una parte financiamiento y por otra una programación adecuada a su realidad local, capaz de cobijar expresiones incluyentes de alta calidad», agrega.

El próximo 4 de septiembre abrirá sus puertas el Centro Gabriela Mistral, un centro madre que junto con los otras instituciones culturales que el Consejo apoya (Matucana 100, Balmaceda 1215, Teatro Municipal de Santiago, Centro Cultural Palacio La Moneda entre otras corporaciones y fundaciones), articulan una gran red cultural a nivel país y en conexión con otros países. «Desde esta infraestructura ya construida en Santiago apoyaremos, tanto a nivel programático como de gestión, el desarrollo de una necesaria infraestructura a nivel regional», explica.

Asimismo anunció la implementación de varios espacios para la cultura del programa de Centros Culturales para ciudades de más de 50.000 habitantes, un programa para los requerimientos comunales de cada territorio que implica una inversión de 70 millones de dólares de aquí al 2012. De esta forma anunció que antes de fin de año, abrirán sus puertas el Centro Cultural de Alto Hospicio, Coquimbo, Villa Alemana, San Joaquín, Quinta Normal, Colina y San Fernando.  «Ahora nos toca dotar a estos centros de un sistema de gestión que sea eficiente y sostenible en el tiempo. Tenemos que pensar de forma integrada; los esfuerzos aislados en esta materia quedan pequeños para el desafío que tenemos por delante. Es por ello, que estamos desarrollando un plan de gestión cultural que permita potenciar la descentralización y regionalización cultural, apoyando de manera integral el acceso a las audiencias de los bienes culturales y aprovechando de manera inteligente la experiencia de los centros culturales que se han desarrollado en Santiago», señaló.