Las ilusiones, vivencias y emociones de 11 internos de la Cárcel de Talca quedaron plasmados en el libro “Desde el Silencio”, publicación que sus propios autores lanzaron en compañía de autoridades provinciales y regionales, y de la población del recinto penal.

La directora regional de Cultura, Mariana Deisler, explicó que esta iniciativa nació de la mano del Plan Nacional de la Lectura, coordinado por el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. Bajo la compañía de la escritora Silvia Rodríguez y con el apoyo de Gendarmería de Chile, los internos desarrollaron durante ocho meses un taller de creación literaria, el que culminó con esta publicación, que estará disponible en bibliotecas y establecimientos educacionales.

“Estos escritos, originales, crudos a veces, sencillos y auténticos, son un ejemplo concreto de las acciones que desarrollamos como Gobierno para lograr hacer de la lectura un derecho de todos los chilenos y chilenas. El fomento lector tiene, para la Presidenta Michelle Bachelet, un enfoque social amplio, inclusivo y democrático, porque debe ser entendido como un factor clave para el desarrollo global del país y el crecimiento integral de las personas”, manifestó.

El director regional de Gendarmería, coronel Jorge Reyes, valoró esta experiencia desarrollada en la unidad penal y destacó el trabajo creativo de los internos. “Lo que hemos vivido hoy con el lanzamiento de este libro es una forma de acercar la cultura a las cárceles a través de una iniciativa de Gobierno. Esto le entrega otra mirada a las personas privadas de libertad, les da la posibilidad de expresar sus vivencias y emociones. Hay que entender que son seres humanos que en algún momento volverán a la comunidad, y queremos que vuelvan como ciudadanos de bien”, expresó.

Escritos

Samuel Castillo, oriundo de Constitución, es uno de los autores del libro. En uno de sus textos, “Las corrientes de mi alma”, se lee: “Brama el mar y sus corrientes. Brama mi corazón, mi alma. Brama los ríos de este invierno sobre el escenario de la desolación”. Esta estrofa de uno de sus poemas, que se une a otros ejercicios narrativos como “Entre gatos y barrotes”, “La sirena de la laguna”, “El jesuita de la mina abandonada” y “Viaje de los brujos al norte”.

“Desde niño me ha gustado escribir, aparecer en un libro siempre fue mi deseo. También me gusta la música, cantar y tocar instrumentos. Estoy feliz. Siento que a través de este libro muchas personas pueden conocernos, agradezco el taller con la profesora y este lindo resultado”, señaló.