Gran expectativa generó  la última minga que trasladó una antigua casa chilota hasta la localidad de Tongoy, en la península de Rilán, y que será parte de la escenografía exterior del film “Y de pronto el amanecer” del cineasta chileno Silvio Caiozzi.

La película, que será rodada en la comuna castreña, busca recrear un pequeño pueblo chilote con cerca de una decena de casas que fueron compradas a sus dueños y trasladas por tierra y mar con el fin de ser restauradas conservando las características originales de tu construcción.

“Esperamos comenzar el rodaje en agosto y tendrá una duración aproximada de tres meses, la película está ambientada en un villorrio de fin de mundo y elegimos esta fecha ya que necesitamos lluvia porque es parte de la atmósfera que necesitamos darle. Sabemos que no será un rodaje fácil, pero estamos muy entusiasmado con este proyecto”, afirmó Silvio Caiozzi cineasta chileno y director de “Y de pronto el amanecer”.

La producción del film será financiada en parte gracias al Fondo Audiovisual de Consejo de Cultura y las Artes que adjudicó a este proyecto una suma cercana a los $120 millones. Alejandro Bernales, director regional del Consejo de la Cultura y las Artes declaró que “nos parece positivo que se realice una producción tan importante en nuestra región, Silvio Caiozzi es un cineasta muy reconocido a nivel nacional e internacional y sabemos que se transformará en un aporte para la Isla Grande”, y continuó: “Este año, vimos cómo el fondo audiovisual a proyectos de la región creció en más de $100 millones, sumando a esta película, otra realización audiovisual llamada “Manzanas Amarillas” de Ignacio Ruiz y una serie de documentales y festivales lo que nos deja muy satisfechos”.

Además de la película, la construcción de este “pueblito de fin de mundo” está asociada a la creación de un proyecto inmobiliario en el que se buscará restaurar completamente las casas para generar un lugar turístico con casa tipo museos en las cuales se puedan realizar talleres y muestras artísticas.