El año pasado la Navidad se celebró en Peralillo y esta vez, funcionarios del Consejo de la Cultura junto a la directora, Marcia Palma González, llegaron hasta el campamento Barrio Alto de la comuna de Malloa, por especial encargo del viejito pascuero.

En ese lugar, niños y adultos esperaban al Consejo de la Cultura en la sede vecinal, bajo un intenso calor que no fue impedimento para compartir y hacer entrega de los regalos que los mismos funcionarios escogieron para los menores.

Para la coordinación de esta actividad se solicitó apoyo a la Fundación Techo, entidad que ayudó a detectar cuál era el campamento que necesitaba más ayuda en esta época especial del año.

El segundo paso fue conocer los nombres y edades de los pequeños y pequeñas para elegir los regalos adecuados para cada uno de ellos.

De esta forma fueron 31 los peques que tenían entre un mes y diez  años, quienes recibieron –además de besos y abrazos- su ansiado juguete que estrenaron inmediatamente.