Arquitectura / Metropolitana PUBLICADO EL 02 NOVIEMBRE, 2016 Concluye restauración de la primera fase de los vitrales del Colegio de Arquitectos de Chile

  • La inauguración del proyecto que cuenta con el apoyo de Fondart Regional  del CNCA de la Región Metropolitana, se realizará el próximo martes 8 de noviembre a las 11:30 hrs. en las dependencias del edificio, ubicado en Avda. Libertador Bernardo O’Higgins #115, Santiago.

Con la presencia de la directora regional del Consejo de la Cultura de la Región Metropolitana, Ana Carolina Arriagada, del equipo a cargo de la obra y de las autoridades del Colegio de Arquitectos, se realizará  la ceremonia de entrega de la primera etapa del proyecto Fondart Regional, de la línea de Conservación y Difusión de Patrimonio Cultural 2015, Patrimonio Protegido por Ley de Monumentos Nacionales, denominado: “Puesta en Valor Vitrales Sede Nacional Colegio de Arquitectos (obra L. Kulczewski). 1era etapa”.

La Sede Nacional del Colegio de Arquitectos, situada en la Alameda, es obra del arquitecto Luciano Kulczewski, construida en 1920 y declarada Monumento Histórico en el año 2010. Este edificio, posee un conjunto de tres vitrales y otras tres vidrieras, que están ubicados en el segundo y tercer nivel del edificio, se destacan, tanto por su estado de conservación (a pesar de su degradación, el conjunto está prácticamente completo) como por el tipo de flora ilustrado, en las decoraciones internas como externas del edificio; en los cornisamentos y estucos se destacan las especies nacionales. Esto hace pensar que el diseño de los vitrales también puede pertenecer al destacado arquitecto.

A los vitrales de los dos halles, se suma un conjunto de la caja escala que no pertenecía inicialmente al inmueble, y que fue introducido durante la remodelación que se realizó en el momento en que se instaló la Sede del Colegio de Arquitectos en el edificio. Estos vitrales corresponden en estilo a la obra de Kulczewski y aun es una pregunta que ocupa a los especialistas, el cómo llegaron al edificio.

El valor de estos vitrales se enmarca en el movimiento industrial local, la actividad de manufactura chilena, los vitrales tienen una fuerte influencia catalana, pero fueron sin lugar a dudas fabricados en Chile, ya sea por los talleres Dell’Orto o por Adolfo Schlack. Su estudio es de primera importancia para comprender este fenómeno, que tiene su nacimiento en la exposición internacional de Santiago en 1875.

En el caso de estas obras en general, los terremotos no han sido el peor enemigo, sino las malas intervenciones de las reparaciones anteriores. La obra en curso contempla dejar testimonio de las piezas que deberán ser removidas (ya sea por mala factura o por la fragilidad de algunas aplicaciones de pintura en frío), pero que permitieron a pesar de todo preservar una idea de conjunto, aspecto vital para la reconstitución de las piezas perdidas.

La obra de restauración de los vitrales (atributo que da el carácter, temperatura e iluminación al interior del edificio) ha sido realizada por el laboratorio Espacio Transparente, al más alto estándar, de manera que ejemplifique una obra de conservación de este género, con una metodología rigurosa y una ejecución de excelencia.

En esta obra, se introdujo una importante innovación, el trabajo de restauración fue realizado bajo la modalidad de Laboratorio-Escuela, que tuvo como objetivo principal la formación de técnicos que puedan, en el mediano plazo, constituir una nueva generación de especialistas de la conservación de vitrales históricos. Esta obra, formó cuatro técnicos en distintos niveles.

Todos estos elementos y la calidad única de esta obra arquitectónica, han motivado a lo largo de los años el esfuerzo del Colegio, y en especial de su comité de patrimonio, el compromiso por la protección y el mejoramiento de la conservación del edificio en su totalidad, prueba de ello es la constancia con que el Colegio lo mantiene.

En esta primera etapa del proyecto de puesta en valor de los vitrales de la Sede Nacional de Arquitectos, se consideró la consolidación de los paneles de vitral de la ventana superior del Hall poniente y los paneles de la caja escala. También contempla el estudio de la obra y la difusión de los avances de la investigación y el proceso de conservación. La difusión a la comunidad es parte integrante de la metodología de trabajo del Laboratorio que ejecuta la restauración. Esta etapa se cierra con la distribución gratuita de una publicación informativa sobre la historia de la obra.

El equipo a cargo está compuesto por Diego Rodríguez Matta, responsable del proyecto y restaurador jefe de la obra (diseñador industrial); Jonatan Zamora, asistente del restaurador jefe (técnico en restauración); Vanessa Ruiz, asistente de restaurador y difusión (candidata a magister en restauración de bienes patrimoniales); Haylin Villalobos, asistente de documentalista y restauración (licenciada en conservación y restauración de bienes culturales); Rubén Vergara, asistente de restauración (estudiante de dibujo arquitectónico); Andrea Araos, documentalista y coordinador del proyecto (candidata a doctor en historia del arte) y Calos Molina Crichton, documentalista audiovisual (magister en ciencias cognitivas).