Profesionales de Servicio País Cultura de la Región de Tarapacá, programa desarrollado por el Consejo de la Cultura en alianza con la Fundación Superación de la Pobreza, fueron distinguidos en el marco del concurso “Por el Chile que soñamos».
Durante el 2011, niños y jóvenes de la localidad de Camiña, en la Región de Tarapacá, fueron testigos directos de una experiencia de rescate patrimonial reconocida con el primer lugar a nivel regional y el tercero a nivel nacional del concurso de buenas prácticas “Por el Chile que soñamos”, dependiente de la División de Organizaciones Sociales (DOS) del Ministerio Secretaría General de Gobierno, por su trabajo en torno a la riqueza cultural y arqueológica local.
Se trata del equipo de profesionales de SERVICIO PAÍS Cultura, programa desarrollado por el Consejo de la Cultura en alianza con la Fundación Superación de la Pobreza, que durante el año pasado realizó talleres a niños en edad pre-escolar hasta estudiantes de enseñanza media, en ámbitos tan diversos como fotografía, cuenta cuentos, aprendizaje de música lakita, tejido a telar, entre otros. Incluso trabajaron con niños en el dibujo e interpretación de los petroglifos en la localidad de Apamilca, casi único lugar que no desapareció con las lluvias registradas en la Provincia del Tamarugal recientemente.
El proyecto se ejecutó desde marzo del año pasado gracias a un convenio tripartito de colaboración entre el Consejo Regional de la Culturas y las Artes (CRCA) de la región de Tarapacá, la Municipalidad de Camiña y la Fundación Superación de la Pobreza. La intervención se enfocó en el trabajo con niños y adolescentes, quienes desarrollaron actividades culturales y artísticas orientadas a ampliar el acceso a bienes culturales y fortalecer la identidad indígena local por medio de la puesta en valor del patrimonio cultural local.
La experiencia vivida durante el 2011 fue plasmada además en el libro “Desarrollo artístico y cultural de Camiña: una mirada desde los discursos y las expresiones de las generaciones jóvenes”, que acaba de ser presentado a la comunidad. En 76 páginas, éste narra y describe los procesos vividos durante la ejecución del proyecto y describe las creaciones individuales y colectivas de los niños y jóvenes protagonistas del desarrollo cultural de la quebrada a los pies del cerro Laimisiña.