Datos curiosos y pasajes del imaginario colectivo valdiviano conforman el relato de esta iniciativa financiada por el Fondart Regional, convocatoria 2020, en la línea exclusiva para Los Ríos, Turismo Cultural. 

El Circuito Cultural Huella-Isla Teja es un proyecto financiado por la Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio de la Región de Los Ríos a través del Fondart Regional, convocatoria 2020, línea Turismo Cultural. La iniciativa tiene por objetivo crear un recorrido caminable que visibilice y ponga en valor el patrimonio natural y cultural de la Isla Teja Antigua, generando una alternativa entretenida, gratuita y de fácil acceso para la comunidad valdiviana y regional, así como turistas que visitan la zona.

El proyecto es dirigido por Eduardo Galaz, geógrafo, y Cristóbal Mc Intosh, psicólogo y actor, quienes comenzaron la investigación con un estudio cualitativo-descriptivo sobre la percepción de actores comunitarios e institucionales en torno al patrimonio natural y cultural (tangible e intangible) representativo del sector Teja Antigua, para luego avanzar en su caracterización y divulgación. Así, la historia se fue abriendo paso develando interesantes antecedentes y datos anecdóticos que hoy dan vida a un repositorio que se actualiza permanentemente en redes sociales.

Volver a ver lo cotidiano con otros ojos y no olvidar nuestra identidad son una de las principales motivaciones de este proyecto según comenta Cristóbal Mc Intosh. “Como equipo hemos visto cómo el patrimonio tangible e intangible de la Teja Antigua está desapareciendo ante el desarrollo inmobiliario y el a veces ciego devenir de la modernidad. Conmovidos por su valor histórico, cultural y natural, y convencidos de que Nadie ama lo que no conoce y nadie cuida lo que no ama (Leonardo da Vinci), nos interesa invitar a caminar cognitiva y sensorialmente la Teja Antigua para re-conocerla y valorarla, y así resignificar nuestra historia, patrimonio e identidad local. Asimismo, nos mueve la reflexión respecto de cómo habitamos nuestros territorios y barrios, qué entendemos por patrimonio, espacio público y comunidad. Estos son nuestros motores, nuestro intento de colaboración en pos de la conservación de este territorio y sus huellas vivas”, señaló.

Por su parte, Eduardo Galaz hace énfasis en el enorme potencial histórico que representa el proyecto, como un testimonio vivo. “Huella-Isla Teja plantea una vivencia de ‘museo al aire libre’ en donde es posible aprender sobre el pasado industrial de Valdivia expresado en íconos territoriales que dan cuenta de la incidencia del terremoto del 60, el acceso a la fluvialidad, el patrimonio natural dado por los humedales y parques, la atmósfera de barrio y el interesante comercio local que se ha instalado en el sector. Estos elementos hacen de este pequeño territorio un espacio único que merece ser conservado. Potenciar esta zona como atractivo turístico cultural aparece como una estrategia para avanzar hacia su visibilización y puesta en valor”, sostuvo.

La Isla Teja posee un gran valor histórico, cultural y ambiental. Las huellas vivas de la historia en su arquitectura como las poblaciones del Seguro Obrero y Cervecerías Unidas; la impronta del pasado industrial en las ruinas de borde río; la trama natural de sus humedales y parques; y una comunidad local que conserva dinámicas propias de la vida de barrio y la identidad valdiviana, la constituyen como un lugar idóneo para el desarrollo de un circuito cultural caminable, sustentable y a pequeña escala.

En este sentido, la invitación  es a visibilizar la riqueza natural y cultural de la Teja Antigua a través de una narrativa que mezcla antecedentes históricos con elementos más contemporáneos, promoviendo de esta forma un vínculo más emotivo con el territorio. Este proceso ha sido complementado con un trabajo visual que contempla imágenes del pasado y piezas de diseño que buscan interpretar la vocación actual de la Teja Antigua.

Esto cobra mayor relevancia hoy, ya que la crisis sanitaria provocada por el COVID-19 ha afectado fuertemente al turismo, debido a que las posibilidades de movilidad son restringidas. En este contexto, el Circuito Huella-Isla Teja se presenta como alternativa viable de turismo interno, orientado fundamentalmente a la comunidad valdiviana y población de la región de los Ríos que visita Valdivia.

Actualmente la información levantada está siendo trabajada en productos concretos como un mapa ilustrado que dará cuenta del recorrido, una guía explicativa con datos interesantes de los lugares identificados y una página web de donde se podrá descargar todo el material para que las personas interesadas puedan realizar el circuito de manera autónoma y gratuita.

Para más información se pueden visitar las redes sociales Facebook @HuellaIslaTeja e Instagram @huella_isla_teja.