Audiovisual / Nacional PUBLICADO EL 11 JULIO, 2014 Norte y Sur: primera película sonora cumple 80 años

Con esta primera producción sonora nacional, se marcó el inicio de la creación de cintas con música y canciones que armonizaron el celuloide criollo.

“Norte y Sur”, la primera película nacional sonora de Jorge Délano, hoy cumple 8 décadas. La cinta que marcó un hito en el país, ya que cambió el paradigma en la producción nacional, sin embargo, hoy no existen copias ni fragmentos que den cuenta de este trabajo pionero.

El secretario ejecutivo del Consejo del Arte y la Industria Audiovisual, Martín Rodríguez, manifestó que es muy importante que Chile preserve su  patrimonio fílmico para que no vuelva ocurrir algo similar con otra película.  “Estamos conscientes que en términos de conservación de patrimonio fílmico aún hay mucho por hacer, y se vuelve crucial la consolidación de una figura jurídica para la Cineteca Nacional  con el fin de resguardar, restaurar y difundir el archivo fílmico”.

Hacia fines de la década de 1920 la producción nacional decayó, debido al arribo de las compañías distribuidoras de Estados Unidos y a la gran depresión económica. A fines de la década de 1930 la producción nacional retomó su actividad, y fue en ese contexto  que nace “Norte  y Sur”.

La cinta retrataba la historia de un joven ingeniero de minas enamorado de una bella mujer que vive una aparente felicidad junto a otro ingeniero norteamericano, quien la ha seducido con su fortuna. Finalmente se da cuenta que su felicidad está en el sur. La acción se desarrolla paralelamente en Chile y Estados Unidos, de ahí el título.

El director Jorge Délano (1850 – 1980)  fue periodista y caricaturista, conocido principalmente por ser fundador de la revista Topaze. Fue ahijado del Presidente Jorge Montt y pariente de muchos de los políticos de los que se burló con su escritura, acarreando la ira de varios de ellos. Además fue escritor, pintor y cineasta. Entre muchas otras distinciones, ganó el Premio Nacional de Periodismo en 1964.

Entre sus obras destacan “Juro no volver a amar” (1925); “Rayo invencible” (1925); “Luz y sombra” (1926); “La calle del ensueño” (1929); “Escándalo” (1940); “La chica del Crillón” (1941); “Hollywood es así” (1944) y “El hombre que se llevaron”  (1946).