Artes de la visualidad / Atacama PUBLICADO EL 08 AGOSTO, 2016 Consejo de la Cultura y Desarrollo Social presentan proyecto para personas en situación de calle

«Por mi ventana bajó un río», es el nombre del proyecto Fondart Regional que se enmarca dentro de la línea de Salud Mental que contempla el Programa Calle y pasa a ser un aporte transcendental e innovador en cuanto al desarrollo del Programa Calle en la región de Atacama.

Como una instancia innovadora para estimular a las personas en situación de Calle, es que el Consejo de la Cultura y el Ministerio de Desarrollo Social, junto a la Universidad Santo Tomás, calificaron el  proyecto “Por mi ventana bajó un río”, a cargo de la reconocida artista visual de la región, Pilar Triviño.

La iniciativa financiada a través de la Línea Regional del Consejo de la Cultura, nace con el objetivo de prestar mayor atención a personas que no siempre tienen las oportunidades de acceder y experimentar con expresiones artísticas, desarrollando herramientas de autoayuda y reconocimiento de cada uno de los participantes del Programa.

Sobre su motivación para generar este proyecto enfocado en personas sin hogar, la artista visual Pilar Triviño, indicó que la orientada a la reconstrucción desde la memoria surge como una forma de  “Rescatar vivencias a través de diferentes áreas artísticas: pintura, grabado y escultura; como una manera de complementar las diferentes miradas con respecto a  este mismo momento (aluviones 25 m). Trabajaremos con caminantes o personas que están en una eterna búsqueda, para quienes la calle es su hogar”.

“Uno de los objetivos importantes del proyecto es apostar por la iniciativa de que el arte es una herramienta que nos ayuda a liberarnos, reinventarnos a darnos una nueva oportunidad y eso queremos, abrir una instancia donde todos podamos reinventar parte de nuestra vida”, precisó.

El proyecto denominado: “Por mi ventana, Bajó un Río”, contempla la realización de talleres artísticos con personas en situación de calle, que nos permitirán trabajar desde la mirada más sensible y no formal, aquellos momentos vividos en el aluvión del 2015. Esta iniciativa no busca entregar habilidades técnicas formales, sino  lograr un espacio de expresión artística a través de las capacidades de los participantes.

Estos talleres se realizaran  durante 10 meses con un grupo de 15 personas, abordando diversas técnicas Plásticas: Pintura óleo y acrílico, Dibujo, Grabado y Escultura. Cada una de las técnicas elegidas serán desarrolladas tomando las historias de vida recopiladas durante el primer encuentro, desde ellas surgirán el imaginario estético a desarrollar.

El Seremi de Desarrollo Social Atacama, Antonio Urbina Bustos, dio a conocer su opinión respecto de esta alianza. “Esto es gratificante, porque tiene a ayudar a las personas que están en situación de Calle. Tenemos programas como este, que nos ayudan a poder ir en apoyo de las personas vulnerables. En Atacama, tenemos al Hogar de Cristo y a la Universidad Santo Tomás, el municipio de Caldera, quienes nos están colaborando para poder hacer visibles estos temas. Aquí existe una alianza virtuosa con el Consejo de Cultura, y espero que se puedan replicar en otras regiones del país”, precisó.

La directora regional del Consejo de Cultura y las Artes, Catisis Lobos Alcota, indicó que “Por mi ventana bajó el río, es un proyecto innovador financiado por el Consejo de la Cultura a través de una línea de postulación nueva en 2016 y que respondió a un compromiso asumido por el Gobierno con la comunidad artística de Atacama para apoyar con recursos iniciativas orientadas a la recuperación de implementación artístico cultural perdida en los aluviones o bien proyectos de reconstrucción y memoria. El proyecto de Pilar Triviño corresponde a este último ámbito, contribuyendo al proceso de reconstrucción desde la mirada de las personas en situación de calle, favoreciendo con ello además  la inclusión y reinserción a través del arte”.

Uno de los usuarios del programa, Armando Quintoman, comentó el significado de estar en el proyecto. “Esto es muy bueno, porque nosotros tenemos problemas de alcohol y esto nos ayudará a mantenernos ocupados, porque si antes tenía 2 horas donde tomaba, ahora esas horas las voy a utilizar en algo mejor, por eso le tomé mucho interés. Nos van a enseñar a pintar y hacer trabajos, con esto, espero sacar algo para mi vida”, comentó.