El encuentro más importante del diseño a nivel mundial estuvo desde el 1 al 25 de junio en la capital británica, y reunió a más de 40 expositores. Chile presentó el pabellón “Materia Prestada / Borrowed Matter” de la investigadora y diseñadora Sofía Guridi y el gestor cultural y curador Juan Pablo Vergara.
El domingo 25 de junio fue el último día de la Bienal de Diseño de Londres 2023, versión que contó con más de 40 expositores de todo el mundo. La presencia de Chile estuvo liderada por el Área de Diseño y Servicios Creativos del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio y la mesa de internacionalización de diseño, donde participa ProChile, Diplomacia Pública (DIRAC) del Ministerio de Relaciones Exteriores e Imagen de Chile. Contó, además, con la colaboración de la Embajada de Chile en el Reino Unido, la Escuela de Diseño Pontificia Universidad Católica de Chile y Aalto University Bioinnovation Center, de Finlandia.
La muestra chilena consistió en un espacio vivo donde los y las visitantes pudieron interactuar con 7 telares o piezas textiles tejidos a mano que combinan fibras y tintes naturales, un nuevo formato biomaterial. Uno de ellos, la obra central, estaba parcialmente sumergida en agua y se fue biodegradando a medida que pasaban los días, aludiendo a la transformación de la materia. Fue una muestra que mezcla tacto, colores, texturas, sonidos y nuevas experiencias a los visitantes: una instalación multisensorial interactiva.
Esta innovadora instalación consistió en piezas biotextiles fabricadas utilizando un subproducto biodegradable de la celulosa en combinación con fibras naturales. Estas piezas, tejidas a telar, propusieron nuevos usos para una materia prima proveniente de la madera. Este año, la invitación fue a reflexionar sobre la industria maderera y sus prácticas extractivistas, proponiendo nuevos usos para la celulosa. Este pabellón exploró las propiedades estéticas y funcionales de la celulosa, el biopolímero biocompatible, biodegradable y renovable más abundante en el mundo.
“El pabellón de Chile en la Bienal de Diseño de Londres finaliza con grandes reflexiones, que es lo que permite este tipo de instancias internacionales, sobre todo cuando se trata de pensar en problemáticas que afectan al medioambiente”, dijo la subsecretaria de las Culturas y las Artes, Andrea Gutiérrez. “Como ministerio, parte de nuestra tarea es estar en estas discusiones y dar cuenta, en este caso, de cómo a través del diseño y el arte, es posible abordar soluciones reales a problemáticas y desafíos mundiales”, agregó la subsecretaria.
Este año la presencia de los pabellones fue interactiva, musical, cinética y con gran innovación, todo esto guiado por el diseño. El ganador de este año fue Turquía, con una instalación que explora el significado de los umbrales y puertas de entrada, representaciones del poder, las fronteras y las jerarquías sociales a lo largo de la historia. El segundo lugar fue para el pabellón de la India, que ofrecía la experiencia multisensorial de un chowk o un mercado abierto; mientras que el tercer lugar fue para Corea del Sur, que transportó a los visitantes al Jardín Virtuoso para explorar cómo podemos vivir de manera armoniosa y sostenible utilizando tecnología de realidad virtual y mixta.
“Para el final de la exhibición, fue muy interesante ver como las piezas textiles se fueron degradando, en parte por el agua y la luz del sol, pero también por las interacciones de los visitantes”, dijo Sofía Guridi, investigadora y diseñadora del pabellón nacional, quien comentó que los visitantes, además de tocar las piezas de biomaterial, interactuaron con ellas de manera tal que dejaron entrever el ´esqueleto´ de las urdimbres. “Esto nos da inspiración para seguir trabajando el concepto y proponer nuevas piezas en el futuro. Para el desmontaje final, todas las piezas se guardaron dentro del mismo cubo de acrílico central, dejando en evidencia el uso eficiente de recursos que buscábamos”.
“La Bienal de diseño, además de ser una gran vitrina de promoción, fomenta el diálogo y reflexión en torno a la importancia del diseño para solucionar problemáticas sociales y ambientales”, dijo el gestor cultural y curador Juan Pablo Vergara. “Quedamos muy satisfechos con el resultado, que se reflejó en un pabellón limpio, de gran contenido investigativo y cargado de mucha poesía, que realmente resaltó del resto y generó mucho interés en la prensa especializada”.