Libro y Lectura / Los Ríos PUBLICADO EL 13 JULIO, 2021 Escolares de Los Ríos conocen epopeya del Riñihue a través de novela gráfica

50 ejemplares de “Nadie más tiene que morir. La epopeya del Riñihue”, surgidos en el marco de una campaña de donación de Poncho Pigo Ediciones, están siendo distribuidos por la Seremi de las Culturas en escuelas de Los Ríos.

Lo primero que llama su atención es el mapa donde reconocen sus localidades y, de ahí, al adentrarse en las páginas, el realismo de las ilustraciones. “Es como un cómic”, dicen, antes de volcarse a leer las viñetas de una historia que les parece conocida, que alguna vez han escuchado por ahí. Son las reacciones de las niñas y niños que por estos días han recibido en sus establecimientos educacionales la donación de ejemplares de la novela gráfica “Nadie más tiene que morir. La epopeya del Riñihue”, tras una alianza entre Poncho Pigo Ediciones y la Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.

Los hermanos valdivianos Malcolm y Rodolfo Leiva Gebhard, creadores de la novela que cuenta con bocetos de Ítalo Ahumada e ilustraciones de Lucho Inzunza, iniciaron una campaña que invitó a adquirir un ejemplar del libro, con el compromiso de la editorial de donar otro igual a escuelas de Los Ríos. En total serán 25 las escuelas de Los Ríos cuyos estudiantes y sus familias tendrán acceso a la publicación y, con ello, a esta parte de la historia regional que rememora la hazaña de un grupo de trabajadores e ingenieros, que efectuaron la descarga controlada del agua y material estancado en el río San Pedro y cuya acción evitó una catástrofe mayor tras el terremoto del 60.

“Desde el ministerio somos el puente para esta hermosa donación de la editorial Poncho Pigo a escuelas de la región. Sin duda, fomentar la lectura es una tarea de todos y agradecemos la generosidad desde la sociedad civil, de personas que compraron un libro y que, con ello, hoy están donando a las escuelas”, señaló el Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Helmuth Palma.

Para la autoridad regional, el ejemplo de lo que ocurrió en 1960 tiene un doble significado en el contexto actual. “Muchas veces leemos libros que son de ciencia ficción, pero esto se trata de un hecho histórico que ocurrió en nuestro territorio y que hoy día también nos permite reflexionar respecto a la unidad, al trabajo en equipo, la esperanza y la resiliencia”, sostuvo el Seremi Palma, a la vez que recordó que el 24 de julio se cumplirán 61 años de la gesta del Riñihue.

Los hermanos Leiva señalan que la decisión de impulsar la campaña de donación coincidió con algunas de las motivaciones originales del proyecto editorial, que, detallan, “fueron rescatar y difundir este episodio histórico de la Región que descubrimos y que era casi ignorado en el resto del país”. “Al ser parte del patrimonio histórico de nuestra historia como nación, nos pareció importante entregar esta narración con la dedicación que requería un evento de esta magnitud: cientos, sino miles, de personas trabajando al unísono para salvar vidas después del cataclismo sísmico más grande de la historia”, comentan.

Los editores coinciden en rescatar la idea de que “la geografía modela el carácter de las personas y, con ello, moldea la cultura de las comunidades que la habitan”. De allí que la llegada de la publicación a las comunidades locales estuviera entre sus prioridades. “Quisimos nutrir nuestro trabajo con esa idea para apoyar la valoración de la identidad cultural del lugar donde nacimos: sin estridencias y sin grandes aspavientos, enfrentados con un desafío monumental, los hombres y mujeres de la región se levantaron, cooperaron y superaron uno de los más grandes obstáculos imaginables con esfuerzo, ingenio y solidaridad”, señalan.

Sobre la alianza con la Seremi de las Culturas destacan el esfuerzo de coordinación y distribución de los ejemplares del libro en comunidades y territorios que consideran relevantes. “Esta colaboración entre lo privado y lo público es testimonio de que la preservación y desarrollo identitario y patrimonial es un esfuerzo conjunto que requiere de todos sin distinción, tal cual nos enseñaron nuestros antepasados cuando se levantaron después del terremoto de 1960”, sostienen.

La distribución, que hasta ahora ha alcanzado a comunas de la provincia de Valdivia, ya ha incluido a la Escuela Rural Pishuinco, Escuela Nueva España y Liceo Bicentenario Alberto Blest Gana de Los Lagos, Centro Educativo Fernando Santiván de Panguipulli y Liceo Bicentenario Camilo Henríquez y Escuela Felipe Barthou de Lanco. En Valdivia los ejemplares ya fueron entregados al Liceo Santa María La Blanca, Liceo Bicentenario Instituto Comercial de Valdivia, Escuela Juan Bosch de Niebla y Colegio Comunitario Enlace del Centro de Internación Provisoria CIP-CRC.

Para las próximas semanas se espera completar las entregas, que incluirán establecimientos educacionales de Río Bueno, La Unión, Máfil y localidades como Los Pellines y Malalhue, así como otras seis escuelas y liceos de Valdivia. En total serán 50 ejemplares a distribuir en establecimientos vinculados a la Seremi a través del Plan Nacional de la Lectura, Programa de Apreciación de la Música Nacional, Mesa Regional de Educación Artística y Fondo de Fomento al Arte en la Educación.

A las 25 escuelas que recibirán la publicación desde la casa editora, se sumarán otras 11 a las que serán entregados ejemplares adquiridos por el programa Fortalecimiento de la Identidad Cultural Regional, y que corresponden a escuelas rurales donde se desarrollan iniciativas culturales participativas. En ese marco ya han recibido la Escuela Rural Rucaklen de Lumaco, en Lanco; la Escuela Particular Trafún Chico, en Panguipulli; la Escuela Rural Mantilhue Alto, en Río Bueno, y la Escuela Rural Chollinco, en Futrono. Mississippi, San Carlos y Riñinahue son otras de las localidades consideradas para pronta entrega.

Reconocer la historia local

Esperanza Gallardo Arriagada, estudiante de sexto año en la Escuela Rural Pishuinco, fue la encargada de representar a los nueve alumnos del establecimiento. Asidua a la lectura y a través de ella a la historia, recibió los ejemplares donados en compañía de su profesor Miguel Rivera. “Doy las gracias por esta donación, para nosotros saber lo que antes ha pasado en Pishuinco. Me han contado muchas historias, mi abuela pasó por estas cosas y me encanta saber los misterios que han ocurrido aquí y los del río también”, comentó.

Por su parte, la llegada de los ejemplares a colegios de Los Lagos es para Patricia Inostroza, directora del Liceo Bicentenario Alberto Blest Gana, un hecho muy significativo. “Este maravilloso libro evidencia una hazaña que se realizó en nuestro territorio, precisamente en Los Lagos. Para mí y nuestra comunidad es muy significativo porque muchos de los padres y abuelos formaron parte de las personas que participaron en esta historia, que es real, no es inventada, sino que es un hecho que nos relaciona con un terremoto y después con una hazaña de la gente de la comuna de Los Lagos, que trabajó en forma unida para luchar contra un evento de la naturaleza que era un peligro latente y que, finalmente, gracias al esfuerzo, la valentía, la unidad característica del pueblo laguino, se logró evitar que pasara a mayores”, señaló.