Ustaritz se ubica a unos 70 kilómetros de Valdivia en el interior de la comuna de Los Lagos, en la región de Los Ríos. Su ubicación guarda memoria de la vida de los asentamientos de reforma agraria e industria lechera que ha marcado hasta hoy la vida de los habitantes del sector.

A metros de la Escuela se ubica la sede y la junta de vecinos se activa en sucesivos proyectos que agregan valor a este patrimonio vivo. Los telares mapuches han sido recuperados en las familias, las mujeres llevan adelante actividades comunitarias y los relatos orales van marcando vidas de nuevas generaciones. En medio de la escuela testigo de antaño una chimenea de ladrillo es vestigio de la casa patronal que alguna vez ocupó el espacio en que hoy se mueve la comunidad educativa.

La Escuela Rural de Ustaritz es una de las tres establecimientos (junto a El Arrayán y Enrique Hevia Labbé) en los que actualmente se ejecuta la Asistencia Técnica Pedagógica (ATE). En el marco del programa Acciona Los Ríos, llegamos hasta el lugar para conocer más sobre el trabajo que realiza el artista educador Mauricio Durán, junto a la directora Patricia Ortiz y la docente Karina Marchant, para fortalecer la gestión de los equipos educacionales en el desarrollo de proyectos vinculados con el territorio y la comunidad.

De acuerdo con las necesidades específicas de cada establecimiento educacional en torno a las artes, la cultura y su articulación con el currículum y la comunidad educativa, la ATE propone herramientas para el diseño, implementación y evaluación de proyectos artístico-culturales de estudiantes que pertenecen a la comunidad educativa, así como en articulación curricular, entre otras materias.

Metodológicamente, la asistencia técnica propone realizar un trabajo colaborativo con las y los agentes que participarán en el proceso, y donde estos sean co-constructores de las actividades que se realizan, a través de la manifestación de inquietudes, problemáticas, iniciativas e intereses que serán esenciales para el óptimo trabajo en las escuelas y/o liceos y que permitirán generar la sustentabilidad de los procesos pedagógicos propuestos por el Programa.

“La ATE ha significado para mí un acercamiento, ser un aporte a las escuelas rurales en el ámbito de poder desarrollar proyectos, pero que estos proyectos estén situados en las necesidades de los establecimientos, necesidades educativas de niños y niñas que asisten a estas escuelas rurales. Se ha intencionado un componente territorial que tiene que ver con la vinculación de estos establecimientos con las historias y a la cultura local de los territorios de donde ella se emplaza”, señala Durán.

“Ir a terreno y estar con los profesores, conocer sus experiencias y ver el esfuerzo que ellos desarrollan para vincular a sus comunidades educativas con elementos de la cultura y el territorio me parecen muy importantes”, añade.

“Mi experiencia con la ATE, con Mauricio, ha sido bastante significativa, sobre todo por el medio en el que estamos, por el entorno. Si es que este proyecto se desarrolla como corresponde va a traer grandes beneficios para los niños de esta escuela rural, ya que ellos no tienen tanta facilidad ni conectividad con el medio más tecnológico, entonces queremos traerles la tecnología y esto acompañado de diferentes proyectos a nuestro establecimiento, cosa que ellos también sean parte de lo que podemos realizar con Acciona”, señaló Patricia Ortiz, directora de la Escuela Rural Ustaritz.

En este contexto, y durante aproximadamente cinco meses, Mauricio ha capacitado y acompañado en la elaboración del Proyecto Memorias Campesinas de Ustaritz, iniciativa que se empieza a concretar tras identificar necesidades en el ámbito de educación artística, para poder ahora asesorarles en la gestión de recursos y redes para su desarrollo.

Este proyecto consiste en la elaboración de una investigación acción participativa con enfoque etnográfico, para conocer más sobre el asentamiento campesino y el desarrollo agrícola y forestal del territorio, realizado por docentes y estudiantes. El objetivo es poder postular a un financiamiento para poder ejecutar esta iniciativa, que ofrecerá como producto la difusión de lo investigado mediante cápsulas audiovisuales, fotos y testimonios itinerantes.

“De todas las ideas que surgieron memorias del sector e hicimos un bosquejo, hilamos las ideas, las plasmamos en la pizarra, y luego las llevamos a papel y las enviamos a Mauricio quien nos ayudó a elaborar con esquemas el proyecto. Hasta que hoy día llegamos a una elaboración más compleja y esperemos que tenga una finalidad y lo llevemos en práctica de la mejor manera posible, con otros actores para que tenga las herramientas necesarias para ejecutarse el proyecto”, Karina Marchant.

Además, el también periodista les ha capacitado en el lenguaje radiofónico, con el fin de compartirles y entregarles nuevas herramientas de comunicación que se transmitirán a sus estudiantes, y parte del trabajo, que también bajo el contexto de Acciona, realiza en la Escuela Fray Bernabé de Lucerna en San José de la Mariquina, donde se encuentra trabajando en dos proyectos como artista educador.