El espacio del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio inaugura esta muestra que hace una conexión entre el centro de Santiago con la memoria mineral del Cerro Chena e invita a explorar alineaciones invisibles y ciclos planetarios.
Como parte de los 35 años de la Galería Gabriela Mistral (GGM), este 19 de diciembre se inaugura Espectro de Montaña. En ella, transforma el espacio expositivo en un nodo energético que articula ciencia moderna y saberes ancestrales.
El proyecto surge de una investigación sobre la relación de las montañas con los ciclos solares y la trama urbana de Santiago, tomando como punto focal el Cerro Chena y su Huaca (Pukará), centro ceremonial prehispánico considerado un lugar sagrado dentro de la cosmovisión andina.
La artista e investigadora Elisa Balmaceda, responsable de la instalación, identifica una línea imaginaria andina, o Ceque, que se proyecta desde esta Huaca hacia la Plaza de Armas, descubriendo que la Galería Gabriela Mistral se sitúa sobre dicho trazado. La muestra, que ocupa la sala principal de la galería, es resultado de un proceso iniciado en 2019 en colaboración con los custodios humanos, comunidades y actores vinculados, y con las entidades naturales del cerro Chena. “De esta forma la Galería se transforma en un lugar de reactivación y reconexión de estas formas de relación con el entorno y los ciclos, ancladas en el paisaje y sus entidades, en la trama urbana de la ciudad y en calendarios andinos”, explica Balmaceda.
La exposición se articula en torno a una instalación inmersiva que opera como un portal/antena cósmico-telúrica. Esta pieza central consiste en una arquitectura ascendente inspirada en la montaña, que culmina en un portal. Desde un cosmograma que reúne las alineaciones solares y lunares del lugar, la estructura integra un tejido de cobre que funciona como antena, amplificando señales electromagnéticas y activando una luz que opera como un “sol interno”, proyectándose hacia el interior del portal donde confluyen elementos lumínicos, sonoros y espectrales.
La pieza se complementa con Líneas de poder (Chena), un video que revisita las alineaciones del Pukará de Chena y reinterpreta el sistema de ceques incaicos, superponiéndolos a un paisaje contemporáneo atravesado por tendidos eléctricos e infraestructuras industriales. El trabajo combina registros de campo, navegación satelital y diálogos con sabedores locales para entrelazar tecnologías ancestrales y contemporáneas.
La propuesta profundiza en la reinterpretación contemporánea de la geografía sagrada andina, contrastando las funciones rituales y calendáricas del Cerro Chena con su entorno altamente industrializado. Espectro de Montaña es, así, un llamado a repensar nuestro entramado energético en diálogo con mundos más-que-humanos.
A lo largo del período de exhibición se realizarán actividades de mediación, como caminatas por los ceques proyectados (Cerro Chena–Galería y Galería–Plaza de Armas) y un encuentro sobre fenomenología andina, con invitados como el arqueoastrónomo Patricio Bustamante y la curadora Carolina Castro.
La Galería Gabriela Mistral, espacio del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, ha sido durante 35 años una plataforma pública dedicada a la experimentación, la investigación y la circulación de las artes visuales contemporáneas en Chile. Su programa expositivo ha impulsado a diversas generaciones de artistas, articulando prácticas críticas, diálogos territoriales y cruces interdisciplinarios que hoy consolidan a la galería como un referente para la escena nacional.
Con Espectro de Montaña, la GGM inicia las celebraciones de su aniversario número 35, un hito que coincide con la presentación de su programación 2026 que estará compuesta por las investigaciones artísticas: “Volver al Paseo Ahumada”, de Sebastián Riffo Valdebenito: Investigación pictórica y performática que se apropia de la estética del centro de Santiago para resignificar la memoria popular y el patrimonio vivo de la capital; “Performance de la sangre”, de Kutral Vargas Huaiquimilla: Cruce entre escultura y videoarte que desplaza la narrativa médica del VIH hacia un lenguaje poético, abordando la enfermedad como un territorio de resistencia política y afectiva; “Notho-espacio: Ficción eco situada para un paisaje en resistencia”, de Tamara Nicole Müller Vega: Instalación inmersiva que, mediante lluvia artificial y estructuras arquitectónicas, plantea interrogantes urgentes sobre la crisis hídrica y la persistencia del bosque esclerófilo; “Radiación Ocre”, de Natalia Belén Montoya Lecaros: Propuesta textil y escultórica que evoca el paisaje del Norte Grande, articulando un relato sensorial sobre el desierto, los tránsitos migratorios y la cosmovisión andina y “Registro Nacional de Espera”, de Colectivo Honorarias (Loreto Muñoz Vallejos – Roery Herrera Valenzuela): Obra interactiva que materializa la burocracia del tiempo perdido, invitando al público a ingresar sus datos para visibilizar la espera como dimensión política de la desigualdad.