Tras el cese de su funcionamiento en forma física en el islote Haverbeck, el museo inspirado en el terremoto y tsunami del sesenta inició la  creación de una versión virtual, lo que se concretó con la presentación oficial  del sitio www.museo1960.cl.

El proyecto fue financiado por el Fondart Regional del Consejo de la Cultura y las Artes de la Región de Los Ríos, a través de su línea piloto de Turismo Cultural Sostenible.

Durante la presentación, que contó con la asistencia de la gobernadora provincial de Valdivia, Patricia Morano, el responsable de la iniciativa, Rodolfo Boekemeyer, hizo un recuento histórico del proyecto, desde su funcionamiento en el islote hasta la implementación del archivo y museo virtual.

«La idea de hacer un museo y que fuera un aporte al desarrollo como producto turístico en la ciudad de Valdivia nació en el tiempo en que a través de un operador estuvimos  recibiendo pasajeros nacionales y extranjeros y muchos de ellos se preguntaban dónde podían conocer un poco más del terremoto más grande registrado en la historia de la humanidad», comentó Rodolfo Boekemeyer.

El ejecutor revisó las secciones más importantes del sitio, destacando el trabajo de infografías que entregan antecedentes científicos y permiten graficar las causas y desarrollo de estos fenómenos naturales, en las que además se incluyó información sobre cómo reaccionar frente a ellos.

El sitio ofrece además la posibilidad de acceder a un recorrido en audio, el que incorpora testimonios grabados de boca de los propios protagonistas del evento telúrico, junto a fotografías y recortes de prensa. Asimismo, la web cuenta con textos en inglés y alemán.

«Este museo virtual no sólo es un lugar donde encontrar antecedentes científicos de estos grandes fenómenos de la naturaleza, sino que también es un espacio para la reconstrucción de la memoria colectiva de nuestra región», dijo en su saludo la directora regional del Consejo de la Cultura, Lorenna Saldías. «Proyectos como éstos apuntan a relevar aquello que nos diferencia, nos identifica, nos pertenece”, sostuvo la autoridad regional.

«Desgraciadamente no pudimos seguir con la explotación turística en el islote, pero pensamos que de lo malo había que sacar lo bueno y vimos que no sólo podíamos llegar a la comunidad de Valdivia, a nuestra región y a los visitantes que llegaran, sino que conquistar el mundo. Valdivia es el epicentro del terremoto más grande registrado y es un patrimonio intangible, que está presente en cada momento de la historia de quienes lo vivieron y cómo lo han trasmitido», concluyó Boekemeyer.