El Consejo Nacional de la Cultura y las Artes está organizando un ciclo de cuatro encuentros nacionales de intercambio de experiencias y buenas prácticas en distintas materias de gestión local del patrimonio, cuyo objetivo es aportar a mejorar la gestión territorial de los activos patrimoniales a través de la circulación de conocimientos, aprendizajes y buenas prácticas en materias de patrimonio cultural entre actores sociales y con la institucionalidad pública y privada.

Los días 20 y 21 de octubre, en el Pabellón 83 y en la sede vecinal del Valle de Elicura, respectivamente, se desarrolló el “Encuentro de Intercambio de Buenas Prácticas y Experiencias de Gestión Local en Rutas Patrimoniales y otros Usos Públicos del Patrimonio Cultural”, el cual tuvo a las comunas de Lota y Contulmo (Valle de Elicura) como anfitriones.

La directora regional del Consejo de la Cultura del Biobío, Marcia Orellana, sostuvo que las buenas prácticas constituyen un instrumento valioso para producir conocimiento generado a partir de la puesta en marcha de iniciativas comunitarias, públicas o privadas para la recuperación, puesta en valor, gestión y salvaguarda de bienes patrimoniales materiales e inmateriales. Por ello, “con esta actividad queremos facilitar espacios de reflexión colectiva entre los actores que están desarrollando experiencias de rutas en espacios patrimoniales u otras estrategias similares de uso público del patrimonio asociadas al turismo comunitario, patrimonio alimentario, educación y valoración del patrimonio, entre otras. La invitación es a conocerlas y revisar cuáles han sido sus resultados y qué se ha aprendido en el proceso”.

De esta manera, se han convocado experiencias implementadas en diversos puntos del país, rutas patrimoniales u otras modalidades, que como iniciativas de turismo sostenible o valoración patrimonial, vienen siendo promovidas por organizaciones de la sociedad civil o del mundo público y privado, y reúnen características de “buenas prácticas”.

Para la organización de este encuentro, el equipo del departamento de Patrimonio del Consejo de la Cultura ha distinguido experiencias concretas, desarrolladas a nivel país, de gestión patrimonial local que demuestren beneficios directos a las comunidades anfitrionas y consideran medidas para evitar la degradación de los recursos locales y patrimoniales. Así como iniciativas innovadoras respecto de las soluciones que propone, los modelos de gestión aplicados y a las necesidades o públicos a los que atiende, considerando la participación ciudadana, o el trabajo asociativo como una factor relevante.

En este sentido, la expositora Diana Guerra, docente y directora de la carrera de Administración en Turismo de la Universidad San Ignacio de Loyola, Perú, y especialista en gestión y políticas culturales, plantea que “la gestión del patrimonio de manera comunitaria contribuye a generar un conocimiento muy fuerte sobre el pensamiento comunal, cómo se establecen, incluso, las relaciones de poder dentro de la comunidad. Creo que trabajar en conjunto, la gestión del patrimonio, te permite conocer la forma en que la comunidad se enfrenta no sólo a su pasado, sino que también al presente y a los retos que se plantean para el futuro”.

La actividad contó con la participación de entidades de las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, Antofagasta, Atacama, Valparaíso, Metropolitana, Biobío, Araucanía, Los Ríos, Los Lagos y Magallanes. Durante la jornada se presentaron algunas de las experiencias de las organizaciones invitadas, hubo espacios de diálogo para el intercambio de ideas sobre los resultados y aprendizajes desarrollados por los gestores.

Además, el encuentro sirvió para mostrar el trabajo desarrollado por la agrupación comunitaria AGESTIONTOUR de Lota, que ha implementado el Circuito “Descubre Lota Caminando”; y la experiencia de turismo comunitario rural diseñado por las comunidades mapuche del Valle de Elicura.