La obra seleccionada -a través de una convocatoria pública del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio- será la propuesta que tendrá el Pabellón de Chile durante el certamen que se inaugurará en mayo de 2026 en la ciudad italiana.
Imagen: Detalle de la obra. Cortesía Norton Maza
Bajo el nombre de «Inter-Reality», del artista chileno Norton Maza, la curaduría de Dermis León y Marisa Caichiolo, y gestión de Claudia Pertuzé, es el proyecto seleccionado para representar a Chile en la Bienal de Arte de Venecia 2026. La propuesta fue elegida a través de una convocatoria pública, destacando su solidez curatorial, la excelencia artística y la viabilidad técnica de la representación chilena.
“Participar en la Bienal de Venecia es de suma importancia ya que sitúa a Chile en la mayor vitrina del arte contemporáneo del mundo. La propuesta Inter-Reality de Norton Maza, destaca por su capacidad de instalar la reflexión crítica de la creación artística nacional, entablando un diálogo poético entre nuestra realidad local y los grandes temas universales, como la ecología y la geopolítica”, señaló la ministra de las Culturas, Carolina Arredondo.
La obra de Norton Maza aborda temas contemporáneos y universales, amplificándolos a través de una perspectiva latinoamericana.
Exteriormente, la obra se manifiesta como una pieza monumental que alude a la geopolítica, el paisaje y la ecología. Este exterior sofisticado y tecnológico contrasta intencionalmente con un interior de dioramas precarios y artesanales, característico de la inventiva latinoamericana. Estos combinan el arte clásico (con referencias a obras de Rembrandt, Vermeer y Caravaggio) con realidades contemporáneas, abordando problemáticas urgentes como las fake news, la migración, la violencia cultural y la devastación ambiental. Esta superposición de paisajes, culturas y tiempos funciona como una metáfora de la historia latinoamericana.
La propuesta ofrece un recorrido inmersivo que activa todos los sentidos. Esto se consigue gracias a una dimensión sonora clave, donde los sonidos de helicópteros y aviones se entrelazan con cantos ancestrales y registros de la naturaleza recogidos a lo largo de Chile, provenientes de un archivo sonoro. El objetivo final es que el visitante salga con una experiencia poética y sensorial que conecta lo íntimo con lo político, lo local con lo global, invitando a «espiar» y a descubrir lo que no está a simple vista.
El proyecto fue seleccionado tras un riguroso proceso de evaluación, por un jurado internacional integrado por Eduardo Feuerhake (Chile), Director del Museo de Arte Moderno de Chiloé (MAM); Raphael Fonseca (Brasil), curador de arte moderno y contemporáneo latinoamericano en el Denver Art Museum; Victoria Noorthoorn (Argentina), directora del Museo de Arte Moderno de Buenos Aires; Jorge Macchi (Argentina), reconocido artista visual argentino; Andrea Pacheco González (Chile), comisaria del Pabellón de Chile en la 60° Bienal de Venecia; Sergio Pardo: (USA); director del Programa de Arte Público del Departamento de Asuntos Culturales de la Ciudad de Nueva York y Voluspa Jarpa (Chile), destacada artista visual nacional que representó a al país en la 58° Bienal de Arte de Venecia.
El proyecto está liderado por un equipo multidisciplinario con destacada trayectoria compuesto por:
El equipo se complementa con el arquitecto asesor Mathias Klotz junto a la artista visual y diseñadora Beatrice di Girolamo.
La participación de Chile en la Bienal de Venecia se debe al trabajo interinstitucional del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, a través de su Secretaría de Artes de la Visualidad, junto al Ministerio de Relaciones Exteriores, mediante la División de las Culturas, las Artes, el Patrimonio y la Diplomacia Pública (DIRAC) y la Embajada de Chile en Italia.
Este 2025 el Ministerio de las Culturas, por primera vez, reconoce a otros proyectos que participaron en el concurso, destacando la calidad y diversidad de las propuestas curatoriales presentadas.
Primer reconocimiento: «Travesías de Amereida ¿Estamos en una tierra donde el obrar es leve?», un proyecto colectivo basado en el legado de Amereida y la Ciudad Abierta, con el gestor Andrés Garcés.
Segundo reconocimiento: «Hacer un sol / To make a sun», que incluyó a los artistas Ester Chacón, Francisco Huichaqueo, Jumana Manna, Daniela Ortíz, Johanna Unzueta y Cecilia Vicuña, con la curadora María Berríos, la co-curadora Amalia Cross, y la gestora María Gracia Obach.
Menciones Honrosas: Se otorgaron a los proyectos «El cosmos y sus planetas, la tierra y todas sus grietas» (Artista: Javier González, Curador: Shumi Nabaneeta, Gestora: Bárbara Camps), «Enjambre / Swarm» (Artista: Josefina Guilisasti, Curadora: Beatriz Bustos, Gestor: Juan Pablo Vergara) y «Silabario» (Colectivo Casagrande – Cristóbal Bianchi – Joaquín Prieto – Julio Carrasco – María José Siebald – Ginés Olivares – Jennifer Monson – Notas Biográficas (Bailarines y poetas), Curadora: Jennifer Mc Coll, Gestora: Magdalena Novoa).