• El documento, que contempla 87 medidas, ya presenta un 81% de avance en su implementación y se configura como una hoja de ruta con permanencia en el tiempo.
• Durante la reunión se destacó el trabajo de elaboración, redacción y publicación de los planes regionales de lectura y se fijaron desafíos para los próximos años.

Liderado por el Ministro de Cultura, Ernesto Ottone R., y con la presencia de la Ministra de la Mujer y la Equidad de Género, Claudia Pascual; además de representantes de las instituciones de Estado que lo conforman, este viernes se realizó en La Moneda el sexto Comité Interministerial de la Política de la Lectura y el Libro 2015 – 2020, instrumento público que cuenta con cinco ámbitos de acción: Lectura, Creación, Patrimonio Bibliográfico, Industria e Internacionalización y Marco Jurídico, y que fue construida gracias a un trabajo que contempló las voces de más de 700 actores del mundo del libro y la lectura a lo largo del país.

“La Política Nacional de la Lectura y el Libro ha logrado articular no sólo a las distintas instituciones del Estado y al sector privado, sino también ha hecho partícipe a la sociedad civil en su implementación y seguimiento, una acción que creemos fundamental para formular políticas públicas que tengan una real injerencia en la vida de las personas, garantizando el derecho a la lectura y el acceso al libro a todos los chilenos y residentes en nuestro país”, comentó el Ministro Ottone.

Y esa metodología, que nace desde lo local y participativo, es la que ha inspirado y ha sido tomada como base para la construcción de políticas en otros países miembros del Consejo del Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe (Cerlalc) y la construcción de todas las políticas regionales, sectoriales y nacional elaboradas por el CNCA para el quinquenio 2017 – 2022 y que suman un total de 24. El equipo coordinador de la Política además fue reconocido en 2017 con el Premio Funciona!, que destaca las acciones innovadoras en el Estado y que van en beneficio de la atención que se brinda a la ciudadanía.

El Secretario de Estado también afirmó que: «La función de este comité es asegurar la entrega oportuna de información para que cada uno de quienes lo componen puedan complementar los instrumentos de seguimiento con los que cuentan para la evaluación de la Política. En ese sentido, se ha asumido el compromiso de llegar al 11 de marzo con las responsabilidades institucionales que aseguren su continuidad y así los equipos de trabajo puedan seguir con su implementación de manera transversal, participativa y con  énfasis territorial, reconociendo las realidades y necesidades de cada una de nuestras regiones”.

Dos de los desafíos que deberán ser abordados durante el periodo que sigue es la modificación a la actual Ley del Libro N°19.227, que permitiría otorgar un marco jurídico e institucional que garantice la proyección en el tiempo de este instrumento, mientras que para 2019 se programó la realización de la tercera Encuesta Nacional de Comportamiento Lector, datos que resultan fundamentales a la hora de evaluar los resultados del trabajo que se ha llevado a cabo durante los últimos años.

En términos concretos, la Política Nacional de la Lectura y el Libro finalizó el 2017 y comienza el 2018 con un auspicioso 81% de medidas con estado de avance y cuyo detalle por ámbito de acción es: 96% en Lectura, 89% en Patrimonio Bibliográfico, 87% en Creación, 72% en Industria e Internacionalización y 33% en Marco Jurídico. Entre las medidas relacionadas al ámbito de la Lectura, destaca la publicación de cuatro planes regionales de lectura: Metropolitana, Valparaíso, Maule y Atacama; y próximos a presentarse Coquimbo y O’Higgins; mientras que las regiones de Arica, Magallanes, La Araucanía, Aysén, Antofagasta, Los Lagos y Tarapacá continúan en proceso de elaboración.