PUBLICADO EL 28 MAYO, 2024
Conciertos 15, 16 y 17 mayo 2024Repertorio interpretado en Las Condes, Quinta Normal y Ñuñoa, bajo la dirección de Emmanuel Siffert
Rodolphe Kreutzer (1766 — 1831)
Obertura de la ópera “Paul y Virginia” (Estreno)
Es la primera vez que se interpreta esta obra en Chile. Kreutzer fue un célebre violinista, compositor y profesor francés, conocido principalmente por sus contribuciones a la técnica del violín y su influencia en otros compositores, como Beethoven, quien le dedicó su famosa Sonata para violín n.º 9, también conocida como la «Sonata Kreutzer».
Esta obertura vibrante y emotiva, encapsula la esencia romántica y dramática de la historia basada en la novela homónima de 1788, escrita por Bernardin de Saint-Pierre. La música de Kreutzer combina un lirismo expresivo con un vigor rítmico, preparando al público para una aventura musical llena de pasión y delicadeza.
René Gerber (1908 — 2006)
Suite francesa n°5 (Estreno universal)
Continuando con los estrenos, presentamos la Suite francesa n°5 de René Gerber, un compositor suizo cuya música se caracteriza por su estilo lírico y su habilidad para fusionar la tradición con la modernidad. Sus composiciones abarcan una variedad de géneros, desde música de cámara hasta grandes obras orquestales.
En esta suite, Gerber ofrece una serie de movimientos variados que combinan melodías encantadoras con ritmos vivaces, evocando distintos aspectos de la cultura y la historia francesa con una paleta de colores orquestales que va desde lo íntimo hasta lo grandioso. Es una obra que refleja la elegancia y la riqueza de la música francesa moderna, un deleite para los amantes de la música contemporánea y una adición fascinante al repertorio de la OCCh.
Camille Saint-Saëns (1835 — 1921)
Romance para corno (Solista: Sebastián Rojas)
El Primer corno de la OCCh, Sebastián Rojas, nos deleitará con la interpretación del Romance para corno de Camille Saint-Saëns. La obra -compuesta en 1874- es un ejemplo perfecto del lirismo y la elegancia que caracterizan el estilo del músico galo, uno de los compositores más importantes de la música romántica francesa.
El Romance destaca por su melodía fluida y su expresividad, utilizando el corno para explorar una amplia gama de emociones desde la ternura hasta la exaltación, exigiendo al solista maestría y sensibilidad interpretativa, para ofrecer una versión profundamente emotiva y técnicamente impecable de esta pieza, resaltando su belleza y complejidad.
Gabriel Fauré (1845 — 1924)
Sicilienne de «Pelléas y Mélisande»
La delicada Siciliana de Gabriel Fauré, forma parte de la suite orquestal «Pelléas y Mélisande», compuesta en 1898 para la obra teatral homónima de Maurice Maeterlinck, sin embargo, fue escrita originalmente como música incidental para una producción teatral de “El Burgués Gentilhombre” de Molière, que nunca llegó a escena.
El término femenino en francés Sicilienne se refiere a un nombre de movimiento en la música barroca , el Siciliano , que se caracteriza por tener un ritmo oscilante. De manera similar, esta obra tiene una secuencia de tonos melódicos dulces y melancólicos. La obra está escrita en clave de Sol menor, con un tempo Allegretto molto moderato.
Esta pieza captura la esencia poética de Fauré y transporta al oyente a un mundo de ensueño. Con su ritmo pausado y sus líneas melódicas sinuosas, la Sicilienne es una joya del repertorio orquestal que combina sencillez y sofisticación de manera sublime. El tiempo de ejecución de la pieza suele oscilar entre tres minutos y medio y cuatro minutos.
Claude Debussy (1862 — 1918)
Claro de luna
El mágico “Claro de luna”, en su versión orquestal, ofrecerá un momento de pura contemplación y belleza. Esta pieza, compuesta originalmente para piano en 1890, es el tercer y más famoso de los movimientos de la Suite Bergamasca.
El nombre es original de un poema de Paul Verlaine, está compuesto en Re bemol mayor (aunque su clímax armónico se sitúa en Do sostenido menor, su tonalidad enarmónica) y con un tempo andante trés expressif. La dinámica predominante en casi toda la obra es el pianísimo, pero en su clímax armónico se pasa al forte. Su estructura formal distingue cuatro secciones: Introducción, desarrollo, clímax armónico y reexposición.
Debussy, uno de los compositores más innovadores del siglo XX, es conocido por su enfoque impresionista que rompió con las convenciones tradicionales de la música clásica, introduciendo nuevas formas de expresión y variedad de armonías. La versión orquestal amplifica esta sensación con una riqueza sonora que solo una orquesta completa puede proporcionar, creando un ambiente de ensueño que envolverá al público. La orquestación añade capas de timbre y color, elevando la obra a nuevas alturas de expresión emocional.
Maurice Ravel (1875 — 1937)
Le Tombeau de Couperign
- Prélude, a la memoria del teniente Jacques Charlot
- Fugue, a la memoria de Jean Cruppi.
- Forlane, a la memoria del teniente Gabriel Deluc.
- Rigaudon, a la memoria de Pierre y Pascal Gaudin.
- Menuet, a la memoria de Jean Dreyfus.
- Toccata, a la memoria del capitán Joseph de Marliave
El programa concluye con esta suite que rinde homenaje a los compositores del barroco francés, especialmente François Couperin. Compuesta entre 1914 y 1917, cada movimiento de esta obra, -originalmente escrita para piano y orquestada en 1919-, es un tributo a amigos del compositor caídos en la Primera Guerra Mundial.
Ravel es conocido por su perfeccionismo y su brillante orquestación, y es uno de los compositores más destacados del impresionismo musical francés. Los movimientos combinan formas de danza barroca con la armonía y la orquestación características del compositor, cerrando el concierto con una nota de respeto y reflexión, que celebra la continuidad y la evolución de la tradición musical de Francia.
