Imagen: Gianfranco Foschino

Desde el 25 de abril en el Centro Cultural de España se estará exhibiendo “RETORNA videoartistas chilenos de exportación”, iniciativa del Área de Nuevos Medios del Consejo de la Cultura que busca formar audiencias mediante el reconocimiento de los autores chilenos y cómo éstos nos representan fuera de Chile. La exhibición estará abierta al público hasta el 3 de junio y el acceso es liberado.

Los artistas que participan de la muestra son Enrique Ramírez, Carolina Saquel, Luis Briceño, Michelle Letelier, Claudia del Fierro, Marcela Moraga, Katia Sepúlveda, Carolina Redondo, Johanna Unzueta, Gianfranco Foschino, Francisca Benítez y Nicokatiushka.

Valentina Serrati, coordinadora de Nuevos Medios explica la visibilidad del trabajo de videoartistas chilenos en el extranjero: “Existe una situación marginal de la producción de este formato, esto sumado al poco reconocimiento de esta área, motiva que muchos creadores decidan emigrar a países donde culturalmente el lenguaje del video arte es parte de la vanguardia. La mayoría se instala de forma permanente y tiene la posibilidad de compartir con otros  profesionales del área, así como ver otros proyectos en contextos de alta competencia y fácil acceso”.

Uno de los objetivos de esta propuesta es facilitar el conocimiento de la creación del videoarte chileno y su participación a nivel internacional.

Misodendro

Por otra parte, durante la jornada del 25 de abril se realizará una intervención espacial del edificio.  Luego de un largo trabajo desarrollado con diferentes escuelas de arte en Santiago, se expone en el CCE el proyecto MISODENDRO, de la artista María Paz Ortúzar, egresada de la Escuela de Arte de la Universidad Ca­tólica. En esta ocasión la curatoría ha sido realizada por el artista visual Mario Navarro.

Estas intervenciones que se realizan durante todo el 2012  buscan la visibilidad a nuevos formatos de trabajos artísticos y de investigación que reflexionen en torno a la arquitectura y el contexto en el cual se em­plazan.

MISODENDRO nos plantea una mirada detenida a nuestra ciudad, a nues­tra arquitectura, a los fenómenos que conllevan los avances tecnológi­cos y como ellos se transforman en la capa superior de la arquitectura. Si en una primera instancia la arquitectura fue pensada en su carácter estético como una estructura estable y permanente, hoy la repentina proliferación y multiplicación de volúmenes externos, como verdade­ros parásitos, están destinadas a persistir tanto como sus materiales lo permitan, dando paso a una estética en constante movimiento, una colección de mutaciones.

En base a la imagen del parásito y apoyándose en la caja de ventilación del edificio que alberga al Centro Cultural de España, la artista busca generar una ilusión en donde el mencionado edificio se vea afectado por una red de mangueras que irrumpen su fachada.